Propuesta de Conciliación familiar

UNA CONCILIACIÓN NO REFERIDA SÓLO A HORARIOS DE ENTRADA Y SALIDA

Breve explicación de la propuesta

En los momentos actuales empieza a carecer de sentido establecer la prestación del trabajador en el contrato de trabajo en función de las horas que “permanece” en su puesto de trabajo. La verdadera conciliación de la vida laboral y familiar debe ir dirigida a lograr una nueva cultura empresarial, una nueva forma de dirigir personas. Dando más libertad al trabajador beneficiará tanto a éste como a la propia empresa, pues la entrega y el compromiso de aquel aumentará. Se trata de aumentar la productividad, el rendimiento, los resultados de cada trabajador, a través de una nueva forma de prestar el servicio y una racionalización de los horarios.

Justificación de la misma

Ninguna de las medidas dirigidas a la conciliación de la vida laboral y familiar basadas en una cierta flexibilización de los horarios de entrada y salida ha dado un verdadero fruto, ni en lo relativo a mejorar la convivencia familiar ni en lo referido a una más eficaz prestación del trabajo o servicio. Más bien han sido vistas por las empresas como algo caro e inadecuado, y por el trabajador por algo como un regalo intrascendente y con plazo de caducidad.

Las medidas de este tipo adoptadas hasta ahora han supuesto en muchos casos un coste para el empleador, por lo que, si tenemos en cuenta el hecho de que es habitualmente la mujer la beneficiaria de estas medidas, resulta como consecuencia una importante desincentivación de la contratación de mujeres en edad de procrear.

Por otra parte, y por lo expuesto, estas medidas están muy lejos de favorecer la igualdad entre hombres y mujeres en el mercado de trabajo, cuando la verdadera conciliación ha de pasar, precisamente por esa igualdad.

A lo que nos referimos en a crear un sistema en el que la necesidad de conciliar la vida familiar y profesional: 

1º. La sientan en igual medida los dos integrantes de la pareja sobre la que se basa cada familia, el hombre y la mujer. Ambos se verán beneficiados en igual medida de estas medidas, ambos demandarán su aplicación llegado el caso, y en consecuencia, la convivencia familiar se verá favorecida.

2º. No suponga coste alguno añadido para el empleador.

3º. Suponga, por el contrario, una medida positiva para l empresa en su conjunto, al aumentar el compromiso y la entrega del trabajador, con lo que su productividad se verá ampliada.

Detalle de la propuesta

La propuesta que aquí se expone consiste en:

1º. En todos aquellos puestos de trabajo que lo permitan, establecer una manera distinta de valorar la prestación de la parte social, basándola en resultados, cumplimiento de objetivos o sistemas normalizados de verificación de prestaciones distintos del mero cumplimiento horario. Se fomentará con ello el teletrabajo, los servicios prestados a distancia y todo sistema de organización que permita un logro de objetivos sin necesidad de la presencia física.

2º. Cuando la presencia física sea inevitable (centros fabriles en general, servicios de atención al público…):

- Se crearán sistema que permitan garantizar que el trabajador lleva a cabo íntegramente su prestación en el tiempo que dedica a ello. Se trata de que las horas de trabajo sean, en efecto de trabajo, de trabajo neto.

- Se penalizará, mediante reducción proporcional de salario, a todo aquel trabajador que alargue de manera innecesaria su jornada laboral.

- Por lo expuesto, las jornadas de trabajo serán sustancialmente de menor duración, pero de más intensidad, con lo que la productividad y eficiencia de la empresa en su conjunto aumentará, y los costes disminuirán, porque:

- Está comprobado que reducciones de jornada o jornadas intensivas mejoran la productividad y reducen el absentismo.

3º. Junto a ello, se crearán comisiones en cada sector de la actividad laboral encargadas de estudiar y realizar propuestas dirigidas a la racionalización de horarios, de manera que queden repartidos en su justa medida los tiempos dedicados al trabajo, al ocio y a la actividad de relación social, sin que se solapen ni confundan.

4º. Dado que la política familiar debe ir dirigida (entre otros objetivos) a consolidar y garantizar la incorporación de la mujer al mundo laboral y la igualdad de derechos hombre-mujer:

- Se fomentará la procreación, mediante un permiso de maternidad/paternidad de 24 meses, de los cuales 12 corresponderán obligatoriamente a la madre y 12 al padre. Dicha medida no representará coste alguno para el empleador.

- El estado debe hacerse cargo del coste de esta medida, así como de proveer una amplia red de guarderías y servicios de asistencia familiar, de modo que la procreación deje de ser considerada como un lastre económico para las empresas y para las familias.

- Se creará un nuevo concepto retributivo en las nóminas, que puede ser satisfecho mediante prestaciones pecuniarias, no pecuniarias, rebajas impositivas u otro tipo de beneficios sociales, basado en el número de hijos: cuando el trabajador tiene cargas familiares su salario debe recoger esta circunstancia.

Los costes de estas medidas deben financiarse exclusivamente con cargo al presupuesto del Estado, como reiteradamente se ha dicho.